La verdad es que ha sido noticia en todos los sitios dedicados y no al mundo del corazón. La agenda de contactos del famoso Pipi Estrada se descubrió publicamente con lo que ello supuso para una marea de usuarios que entre el morbo, las ganas de sentirse por un momento VIPS y lo de fastidiar un poco al famosete que tanto les disgusta han colapsado muchas líneas de teléfonos de famosos que se han visto obligados a cambiar de SIM.
Lo cierto es que siempre avisamos a los lectores que nos siguen de lo peligroso que resulta en muchos casos utilizar redes WiFi públicas, sobre todo si estas no ofrecen una protección lo suficientemente fuerte como para asegurarnos de que todo lo que hagamos trámite nuestra conexión se quede en el ámbito privado. Y si nadie está a salvo de que un hacker al otro lado de la calle consiga nuestra red, más fácil se lo ponen si la conexión trámite para acceder a internet no tiene clave.
Se pueden sacar muchas conclusiones de todo este revuelo, y probablemente a casi todos los que han dado la noticia lo que más le importa es que ahora son de dominio público los teléfonos de los famosos televisivos, pero a mi, y de seguro que también a muchos de ustedes, que no soy nada del corazón, lo que me preocupa es que todos estos intentos fraudulentos de hacerse con datos ajenos se multipliquen, porque ya saben que el efecto llamada esta ahí, y más aún cuándo hablamos de un personaje como es el caso de Pipi Estrada.