Cloudflare, la empresa estadounidense que protege y acelera millones de páginas web en todo el mundo, ha lanzado un mensaje inusual dirigido específicamente a usuarios y empresas de España. Les pide que, si sus sitios han tenido problemas de acceso “inesperados” desde territorio español, los midan y documenten con una aplicación gratuita llamada OONI Probe.
El aviso se difundió a través de su cuenta oficial en la red social X, pocas horas antes de que un apagón global afectara de forma masiva a sus servicios. Aunque la compañía no cita a ningún actor concreto, el contexto es conocido: desde hace meses su red de distribución de contenidos (CDN) se ve afectada por bloqueos de direcciones IP ordenados por LaLiga a los operadores españoles los días de partido, como parte de su estrategia contra el fútbol pirata.
El problema es que, cuando se bloquea una dirección IP compartida, no solo puede caer el servicio ilegal que se persigue: también pueden verse arrastradas webs completamente legítimas que pasan por la misma infraestructura. Y ahí es donde entra la iniciativa de Cloudflare: recopilar pruebas técnicas, independientes y comparables para demostrar hasta qué punto está ocurriendo esto.
Un mensaje claro: “¿Tu sitio web ha tenido problemas de acceso en España?”
El llamamiento de Cloudflare va dirigido a cualquier persona o empresa que utilice sus servicios y esté en España. El texto es sencillo: si un sitio web ha sufrido problemas de acceso inesperados, la compañía pide ayuda para “descubrir por qué”.
En lugar de remitir a formularios propios o a herramientas internas de diagnóstico, Cloudflare invita a descargar OONI Probe y a usarla para analizar la conectividad con la página afectada. Insiste en dos ideas clave:
- los resultados son anónimos,
- y ayudan a medir el bloqueo de sitios web en cada región.
Es decir, el objetivo no es solo resolver el problema de un cliente concreto, sino también alimentar una base de datos global que permita ver patrones: qué se bloquea, cuándo, cómo y desde qué redes.
OONI Probe: un “termómetro” independiente para saber si hay bloqueo
Detrás de la app recomendada por Cloudflare está OONI, el Open Observatory of Network Interference, un observatorio internacional que desde 2012 documenta casos de censura y manipulación de tráfico en internet.
OONI está respaldado por decenas de organizaciones de derechos digitales, tecnológicas y académicas. Su misión es sencilla de explicar: comprobar, con datos, si una conexión a internet funciona con normalidad o si alguien en medio del recorrido —un operador, un gobierno, un intermediario— está bloqueando o alterando el acceso a determinadas webs o servicios.
Para ello, ha creado OONI Probe, una herramienta disponible:
- como aplicación de escritorio y programa de línea de comandos para ordenadores,
- y como app para teléfonos móviles.
Cualquier persona con conexión a internet puede instalarla y realizar pruebas contra una página concreta. A diferencia de un simple “ping” o una recarga de navegador, OONI Probe examina varios puntos del recorrido para detectar los métodos de bloqueo más habituales.
Qué comprueba OONI Probe cuando se analiza una web
Cuando un usuario introduce la URL de un sitio web en OONI Probe y ejecuta un test, la herramienta realiza una serie de comprobaciones técnicas que luego traduce en resultados claros:
- Manipulación de DNS
Comprueba si los servidores DNS (los que traducen nombres como ejemplo.com a direcciones numéricas) están devolviendo respuestas falsas, redirigiendo a otra web o simulando errores que no existen. - Bloqueo de la conexión TCP
Analiza si la conexión entre el dispositivo y el servidor se corta de forma sistemática antes de completarse, algo típico de ciertos sistemas de filtrado en red. - Intercepción de peticiones HTTP
Verifica si las peticiones que hace el navegador para cargar una página (HTTP o HTTPS) son interceptadas, modificadas o bloqueadas antes de llegar a destino.
Según recoge la propia documentación del proyecto, estos son precisamente los mecanismos que utilizan muchas operadoras para aplicar bloqueos en España: interrupciones en la conexión TCP y en las peticiones HTTP durante los días de partido.
Una vez realizado el test, los datos se envían a los servidores de OONI de forma anonimizada. Allí se agregan con los de otros usuarios y pueden visualizarse en OONI Explorer, una plataforma donde se observa si un dominio concreto presenta fallos aislados o si aparece como bloqueado de forma repetida en una región o red determinada.
Un historial de bloqueos documentados: del referéndum catalán al fútbol
OONI no es una herramienta recién llegada. En sus más de diez años de vida ha servido para documentar numerosos casos de censura y bloqueo selectivo en distintos países.
En España, uno de los hitos más conocidos fue el informe publicado en 2017 que recogía el bloqueo de sitios web vinculados al referéndum del 1 de octubre en Cataluña. Gracias a las mediciones realizadas por usuarios que ejecutaron OONI Probe, se pudo demostrar que determinadas webs dejaron de ser accesibles de manera sistemática desde algunas redes, y que no se trataba de simples fallos técnicos.
El patrón que ahora se quiere estudiar es distinto —centrado en los bloqueos ligados a contenidos de fútbol—, pero la lógica es la misma: usar datos medidos desde muchos puntos de la red para pasar del “parece que está caído” al “sabemos que se está bloqueando”.
La batalla judicial de fondo
Este esfuerzo de recopilación de evidencias no se produce en el vacío. Cloudflare mantiene abierto en España un pulso judicial en torno a los bloqueos de IP relacionados con LaLiga.
En marzo, los tribunales rechazaron los incidentes de nulidad impulsados por la propia compañía y por la conferencia de ciberseguridad RootedCON, que buscaban anular la sentencia que permite ordenar estos bloqueos a los operadores. El juez consideró entonces que no había quedado suficientemente probado que terceros ajenos a la piratería resultaran dañados.
El caso sigue su recorrido, con recursos ante instancias superiores, incluido el Tribunal Constitucional. En este contexto, disponer de mediciones independientes que muestren cómo y cuándo resultan afectadas webs legítimas puede ser crucial para sostener el argumento de que las medidas son desproporcionadas y tienen efectos colaterales no deseados.
Qué pueden hacer los propietarios de webs y los usuarios
Aunque el debate pueda parecer muy técnico, la participación es relativamente sencilla y está al alcance de cualquier persona con mínimos conocimientos digitales. Para los responsables de páginas que usan Cloudflare en España, los pasos básicos serían:
- Observar los síntomas
Si la web funciona con normalidad desde otros países o usando una VPN, pero falla desde conexiones españolas —sobre todo en determinados días o franjas horarias—, podría tratarse de un bloqueo selectivo y no de un problema del servidor. - Instalar y ejecutar OONI Probe
La aplicación se instala en ordenador o móvil. Una vez abierta, se introduce la dirección del sitio y se lanza la prueba. El proceso se completa en pocos minutos. - Repetir desde distintas redes
Realizar tests desde conexiones de diferentes operadores (fibra, móvil, otras WiFi) ayuda a detectar si el posible bloqueo afecta solo a una compañía o es generalizado. - Guardar evidencias
Aunque los resultados se envían de forma anónima a OONI, los administradores pueden guardar capturas, informes y horarios de fallo para documentar el impacto en su servicio.
Para los usuarios de a pie, saber que existen herramientas como OONI sirve también para entender mejor qué ocurre cuando una web deja de cargar: a veces no es un simple error, sino una decisión en algún punto intermedio de la red.
Un debate que va más allá del fútbol
Detrás de esta llamada de Cloudflare se esconde un debate más amplio sobre cómo se bloquea contenido en internet y quién decide esas restricciones.
Los defensores de los bloqueos por IP sostienen que son una herramienta eficaz y necesaria para combatir infracciones graves, como la piratería audiovisual. Sus críticos, en cambio, alertan del riesgo de convertirlos en una especie de “apagado general” que arrastra por el camino servicios completamente legítimos, con impacto sobre la libertad de información y el normal funcionamiento de la red.
La iniciativa de usar OONI Probe para medir lo que está ocurriendo en España introduce un elemento clave: datos verificables. En lugar de basarse solo en percepciones o testimonios aislados, permite construir un mapa detallado de cuándo, dónde y cómo se bloquean webs en el país.
En función de lo que ese mapa revele en los próximos meses, el debate sobre los límites y las reglas del bloqueo de contenidos en internet podría dar un giro importante, tanto en los tribunales como en la opinión pública. Y, por primera vez, serán los propios usuarios y administradores de webs quienes tengan en su mano buena parte de las pruebas.
Referencias: Banda Ancha, Redes Sociales, Twitter X y OONI Probe








