La ciberseguridad vehicular se ha convertido en un tema de vital importancia debido a la rápida digitalización y los avances tecnológicos que experimenta la industria automotriz. En un esfuerzo por abordar esta necesidad emergente, DEKRA y CESVIMAP, junto con el grupo Automotive Security Research Group (ASRG), organizaron una jornada centrada en el tema del Car Hacking. El evento tuvo lugar el pasado 8 de noviembre en la Universidad de Málaga y congregó a expertos en ciberseguridad automotriz con el objetivo de resaltar la urgencia de integrar medidas de protección desde la fase de diseño de los vehículos.
Durante el encuentro, especialistas en la materia destacaron los peligros que enfrentan los automóviles si no cumplen con los estándares mínimos de ciberseguridad, riesgos que van desde la manipulación de funciones críticas del vehículo, como frenos o dirección, hasta la posibilidad de que los datos personales del conductor sean filtrados. Estos problemas afectan tanto el rendimiento del vehículo como su sistema de seguridad, haciendo evidente la necesidad de reforzar las medidas de protección.
Para ilustrar estos riesgos, DEKRA y CESVIMAP organizaron una serie de demo-talleres en los que realizaron pruebas prácticas de hacking sobre un vehículo proporcionado por CESVIMAP. Gracias a estas demostraciones, los asistentes pudieron observar cómo los sistemas del automóvil pueden ser vulnerados por expertos que emplean técnicas específicas de hacking.
Rubén Lirio, director de Ciberseguridad en DEKRA, subrayó la importancia de proteger los vehículos modernos, destacando que la ciberseguridad no es opcional sino vital en esta era digital. Lirio enfatizó el compromiso de su organización para elevar los estándares de seguridad y destacó el papel crucial de eventos como este para aumentar la conciencia y desarrollar conocimientos técnicos en el sector automotriz.
Enrique Zapico, director del Mobility Lab de CESVIMAP, hizo hincapié en la importancia de asegurar los sistemas avanzados y de conectividad de los vehículos actuales. Explicó que las interfaces de comunicación, como el Bluetooth y Wi-Fi, aumentan la vulnerabilidad frente a ciberataques que pueden afectar aspectos clave como el acceso sin llave o los sistemas de infoentretenimiento.
El encuentro permitió visibilizar los desafíos actuales de ciberseguridad en la industria automotriz y buscó fortalecer la confianza de los consumidores en las nuevas tecnologías. Identificar vulnerabilidades de manera temprana y diseñar medidas de mitigación son claves para un futuro más seguro en la movilidad.
Las demostraciones incluyeron ataques ficticios a diferentes superficies de acceso, comenzando con interfaces inalámbricas y avanzando hasta analizar interfaces cableadas. En este proceso, el uso de manuales de servicio y herramientas técnicas fue crítico para identificar las líneas de comunicación a las que se podía acceder desde el exterior del vehículo.
Los expertos que participaron recalcaron la necesidad de integrar pruebas de penetración en el ciclo de desarrollo de los vehículos y destacaron la importancia de implementar actualizaciones de software y sistemas de cifrado en las comunicaciones del automóvil. Estas acciones no solo protegerán la información sensible del vehículo, sino que también contribuyen a establecer la ciberseguridad vehicular como una prioridad colectiva en toda la industria automotriz.