Google ha dado a conocer su nueva plataforma de comunicación tridimensional, Google Beam, que hereda la visión del ya conocido Project Starline y lleva la experiencia de las videollamadas un paso más allá. El objetivo: que las conversaciones a distancia sean tan naturales, fluidas y humanas como un encuentro presencial, y todo ello gracias a la inteligencia artificial y el procesamiento avanzado de vídeo en 3D.
¿Qué es Google Beam y por qué marca la diferencia?
Google Beam utiliza un sofisticado modelo de IA para transformar videollamadas convencionales en encuentros volumétricos, donde los interlocutores pueden percibirse en tres dimensiones, captar la profundidad de la escena, y leer las expresiones y el lenguaje no verbal de forma natural, sin gafas ni dispositivos especiales para el usuario final. El resultado es una sensación de “presencia real” que trasciende la pantalla y redefine el estándar de la comunicación remota.
La plataforma funciona sobre Google Cloud, lo que le proporciona escalabilidad y robustez, y se apoya en un sistema avanzado de pantallas de campo de luz que recrean el efecto 3D en tiempo real. Uno de los grandes retos resueltos ha sido la baja latencia, esencial para que las reuniones sean fluidas y la interacción no se vea interrumpida.
IA y traducción instantánea: romper la barrera del idioma
Uno de los primeros usos reales de la inteligencia artificial en Google Beam es la traducción de voz en tiempo real, disponible inicialmente en inglés y español, pero que irá incorporando más idiomas en las próximas semanas. La traducción preserva las inflexiones y el tono, permitiendo conversaciones multinacionales mucho más auténticas y eficaces. Esta función ya se ha integrado también en Google Meet, reflejando el compromiso de la compañía por hacer la comunicación global más accesible.
Despliegue y alianzas estratégicas
El lanzamiento de Google Beam no es solo una declaración de intenciones, sino que ya cuenta con socios tecnológicos y empresariales de primer nivel. HP será el primer fabricante en lanzar dispositivos compatibles, presentándolos en InfoComm este mismo verano, y grandes nombres como Zoom, Deloitte, Salesforce, NEC, Citadel, Duolingo o Recruit han comenzado a integrar y probar la solución en sus organizaciones.
Google también ha tejido alianzas con integradores globales como Diversified y AVI-SPL para asegurar el despliegue en empresas de todos los tamaños, especialmente aquellas con operaciones internacionales o equipos distribuidos.
Oportunidades y retos de la videollamada 3D
La llegada de Google Beam abre el debate sobre el futuro de la comunicación remota y las oportunidades para sectores como la salud, la educación, los recursos humanos o la atención al cliente.
- Ventajas: mayor empatía, comprensión, colaboración más natural y reducción de las barreras lingüísticas y geográficas.
- Retos: coste de la infraestructura inicial, adopción por parte de usuarios menos tecnológicos y desafíos de privacidad asociados a la captura y procesamiento de datos biométricos en 3D.
El futuro del trabajo y la comunicación digital
El contexto de trabajo híbrido y la globalización de los equipos han convertido la comunicación virtual en un eje central de la productividad. Google Beam responde a esta tendencia ofreciendo una solución que no solo busca conectar dispositivos, sino también emociones y matices humanos. La promesa de Google: estar “cara a cara” desde cualquier parte del mundo, sin importar la distancia.
Habrá que seguir atentos a su despliegue y adopción real en empresas y organizaciones, pero lo que está claro es que la IA y el 3D van a marcar el nuevo estándar de la videocomunicación empresarial en la próxima década.