Mats Steen, un joven noruego, ha dejado un legado perdurable en la comunidad de jugadores del mundialmente popular videojuego World of Warcraft. A lo largo de su vida, Mats se enfrentó a desafíos agobiantes debido a la distrofia muscular de Duchenne, una enfermedad degenerativa que le fue diagnosticada a los 7 años de edad. Esta condición mermó progresivamente su movilidad, obligándolo, tras años de resistencia, a depender de una silla de ruedas.
Desde pequeño, Mats mostró un cariño especial por un zorro de cerámica, que se convirtió en un símbolo permanente durante su infancia. Este pequeño zorro lo acompañó siempre, y hasta tuvo un lugar destacado en su estantería en forma de otro zorro miniatura que recibió como regalo de cumpleaños, significando un lazo emocional para él.
A su fallecimiento en 2014, a los 25 años, sus padres quisieron honrar su memoria de una manera especial. Decidieron que su lápida llevaría tallado un zorro en honor a ese vínculo simbólico que tenían desde la infancia. Sin embargo, lo que desconocían era el impacto que Mats había tenido en la comunidad de World of Warcraft.
Durante sus últimos años, Mats encontró una forma de conectarse profundamente con personas de todo el mundo a través de este juego en línea. La comunidad que lo rodeaba en el juego quedó impactada por su espíritu y fortaleza. Como muestra de homenaje, se ha erigido una lápida virtual dentro del juego, dedicada a Mats, destacando su influjo y la marca que dejó en muchos.
La historia de Mats Steen es una prueba conmovedora de cómo el amor y la conexión pueden trascender las barreras físicas y vivir en los espacios digitales. No solo tocó las vidas de quienes lo llegaron a conocer en persona, sino que su legado continúa a través de aquellas amistades virtuales que formó mediante su pasión por los videojuegos. Su existencia fue una inspiradora lección sobre el poder del espíritu humano y la capacidad de amar sin límites.
