Con el surgimiento de las redes sociales y los servicios de mensajería instantánea se podría haber pensado que los correos electrónicos quedarían en el pasado, sin embargo, estos no pierden vigencia y se están convirtiendo en herramientas indispensables para mucho más que solamente enviar y recibir mensajes y archivos.
Correo por Internet, un servicio que, originalmente, tenía la finalidad de ser utilizado para enviar mensajes a través de la red, ofreció desde sus inicios la oportunidad de agregar algunos archivos, pero que con el correr del tiempo se ha convertido en una dirección relacionada con la identificación de las personas, la cual sirve para encontrar empleo, recibir información de las cuentas bancarias, recibir pagos por Internet, realizar pagos y depósitos a terceras personas, identificación para ser registrado en diversos sitios de Internet, así como muchas otras funciones inimaginables en sus comienzos.
La clave para que dicho servicio se mantenga vigente ha sido la actualización sistemática de sus funciones y aplicaciones, adaptándose de manera casi inmediata a las necesidades del mercado, muchas veces de manera imperceptible, pero ofreciendo siempre las ventajas de las redes sociales e incorporando no solamente una conexión con ellas, sino transformándose en una auténtica red social, donde se puede localizar toda la actividad de nuestros contactos en otras redes sociales, además de las acciones en el sitio de correo electrónico de que se trate.
Tanto Yahoo, Gmail y Hotmail han ofrecido cambios a sus usuarios buscando mantenerse en la preferencia de ellos y ganar más mercado dentro de este giro, lo que muestra una competencia muy fuerte para no quedar en el olvido, lo cual se ve muy difícil que ocurra, dada la importancia que la dirección electrónica ha cobrado en la vida de millones de usuarios, tanto en lo personal, como para poder tener acceso a servicios antes inexistentes.