En la era digital en la que nos encontramos, conocer las amenazas que ponen en riesgo la seguridad de nuestra empresa es el primer paso para combatirlas. Las empresas dependen, en gran medida, de Internet para el desarrollo de su trabajo diario y, por tanto, están constantemente expuestas a diversos peligros. En este artículo de blog conoceremos una técnica que los ciberdelincuentes utilizan para infiltrarse en los sistemas corporativos: el ataque Pass-the-Cookie.
Cuando navegamos por Internet, en ocasiones, nos encontramos con un mensaje que nos informa sobre el uso de las cookies y nos pide nuestro consentimiento, pero, ¿realmente sabemos qué estamos aceptando?
Las cookies son pequeños ficheros con información que se almacenan en nuestro dispositivo cuando visitamos un sitio web. Estas cookies contienen información que la web utiliza con diferentes fines, como recordar las preferencias del usuario, mejorar su experiencia en línea u ofrecerle un servicio más personalizado.
Algunas de ellas son opcionales, como las que se utilizan para la publicidad, pero otras son necesarias, ya que permiten el buen funcionamiento de una web. Una gestión inadecuada de estas puede derivar en vulnerabilidades que pueden ser explotadas por los ciberdelincuentes.
¿Cómo funciona el ataque Pass-the-Cookie?
En este contexto surge el ataque Pass-the-Cookie, una técnica que los ciberdelincuentes han desarrollado para poner, en una ocasión más, la seguridad de las empresas en jaque.
El ataque consiste en el robo de las cookies para obtener las sesiones de los usuarios y utilizarla en su propio beneficio. Para ello, utilizan diferentes técnicas que ya conocemos, como ataques de phishing y malware o, incluso, comprarlas a través de la Dark Web. Aprovechando esto, los ciberdelincuentes se hacen pasar por el usuario legítimo, obteniendo acceso a cuentas y sistemas y, por tanto, poniendo en riesgo la seguridad y privacidad de la empresa.
¿Cómo puede afectar a una empresa ser víctima de este ciberataque?
Las consecuencias de ser víctima del ataque Pass-the-Cookie pueden ser devastadoras para la empresa:
– Pérdida de datos confidenciales, como datos de clientes, información financiera o propiedad intelectual.
– Fraude financiero, en caso de que los ciberatacantes se hagan con datos bancarios.
– Interrupción de las operaciones del negocio durante el proceso de investigación y mitigación del incidente, derivando en una posible pérdida de ganancias.
– Daño reputacional y pérdida de confianza de los clientes debido a la violación de sus datos, generando un impacto a largo plazo en la imagen de la empresa.
– Extorsión por parte de los ciberdelincuentes que pueden exigir un rescate económico a cambio de la información robada.
– Consecuencias legales por incumplimiento de las leyes y regulaciones de protección de datos y debido a las demandas de los clientes afectados.
– Costes económicos derivados de la recuperación del incidente.
La prevención es fundamental: recomendaciones y buenas prácticas para no ser víctima de este tipo de ataques
La mejor defensa contra este y la mayor parte de los ciberataques es, sin duda, la prevención. Una empresa preparada y concienciada es menos vulnerable a sufrir un incidente de seguridad. Implementar medidas de seguridad sólidas y adoptar una serie de buenas prácticas puede reducir considerablemente la vulnerabilidad de los sistemas, entre ellas:
– Uso de HTTPS: tanto en el sitio web de la empresa, si lo tiene, como en los que los empleados visitan, el protocolo https asegura que la comunicación entre el navegador y el usuario está cifrada, dificultando así la intercepción de los datos a los ciberdelincuentes.
– Mantener los sistemas actualizados: un software actualizado no solo mejora las funcionalidades del mismo, sino que también incluye parches de seguridad que corrigen vulnerabilidades conocidas que los ciberdelincuentes podrían aprovechar para hacerse con las cookies.
– Gestión de sesiones segura: utilizar políticas de expiración adecuadas para las cookies que hagan que estas caduquen cada cierto tiempo y evitar dejar sesiones abiertas en equipos no confiables.
– Educación y concienciación del personal: sobre la importancia de la navegación segura y los riesgos asociados a las malas prácticas, como acceder a enlaces sospechosos o proporcionar información confidencial en sitios poco fiables.
– Doble factor de autenticación: siempre que sea posible, para proporcionar una capa extra de seguridad, en caso de que las credenciales se vean comprometidas.
– Monitoreo continuo y auditorías periódicas: para detectar actividades anormales, como inicios de sesión sospechosos, y para detectar fallos de seguridad en la empresa.
¿Qué puedo hacer si mi empresa ha sido víctima de un ataque Pass-the-Cookie?
En caso de ser víctima de este u otro tipo de ataque, tener un plan de respuestas ante incidentes puede ayudar a mitigar los daños y restablecer la actividad de la empresa en el menor tiempo posible.
Este plan de respuesta ante incidentes debe establecer de forma clara los pasos a seguir desde que se conoce el incidente, como desconectar inmediatamente las cuentas comprometidas y la notificación a las autoridades pertinentes.
Recuerda que puedes contactar con nosotros a través de la Línea de Ayuda en Ciberseguridad de INCIBE (017), los canales de mensajería instantánea de WhatsApp (900 116 117) y Telegram (@INCIBE017), o del formulario de contacto para empresas, que encontrarás en nuestra web. Expertos en la materia resolverán cualquier conflicto online relacionado con el uso de la tecnología y los dispositivos conectados.
vía: INCIBE.