Los ambiciosos planes de Microsoft para el lanzamiento de su nueva consola Xbox pueden terminar saliendo mal y dejando a PlayStation en los primeros puestos de ventas. ¿Cómo será la nueva consola y cuales son sus ventajas y puntos oscuros?
Uno de los rumores que más cobró fuerza en los últimos días bien podría ser uno de los puntos negativos a la hora de hacerse con la nueva Xbox 720: la consola tendrá que estar conectada a Internet todo el tiempo para poder jugar y abrir los servicios. ¿Será cierto este rumor o quedará en la nada? ¿Por qué traería consecuencias negativas para los compradores?
A partir del lanzamiento del nuevo SimCity de Electronic Arts hemos descubierto un aspecto interesante de los jugadores actuales: no les gusta tener que jugar en línea de forma obligatoria, y aún si lo hicieran el servicio tiene que ser excelente porque no están dispuestos a pagar una conexión a Internet para la consola si los servidores colapsan.
Además, la necesidad de estar siempre conectados a Internet responde a otra de las supuestas características de Xbox 720: la imposibilidad de jugar con títulos usados, una sentencia de muerte para la consola ya que con los precios actuales los juegos de segunda mano suelen ser los que catapultan el éxito de ventas de una consola.
Todavía Microsoft no ha desmentido ni confirmado los rumores, pero mientras PS4 se va adelantando y cobrando una forma definitiva, la empresa de Bill Gates explora a fondo el sector de las consolas pensando en obtener ganancias allí después de una caída muy importante en el sector de los ordenadores de escritorio tradicionales.
¿Cómo te gustaría que fuera Xbox 720? ¿Estás de acuerdo con la decisión de imposibilitar el uso de juegos usados? Veremos cuantos de estos rumores terminan siendo ciertos cuando Microsoft revele definitivamente la consola.