Jugar en el móvil a través de las aplicaciones está de moda. Es una tendencia en auge y que por lo visto parece ser definitiva y más ahora cuando irrumpen en el panorama las tablets con tanta fuerza, y comienza a surgir un nuevo dispositivo tecnológico, los «Phablet» (hÃbridos entre smartphone y tableta, como el Samsung Galaxy Note).
Todos estos dispositivos utilzan aplicaciones para exprimer al máximo su rendimiento y serÃa negar la realidad si dijeramos que las apps no nos han facilitado enormemente la vida desde que han llegado, desde el terreno del ocio con los juegos, hasta la productividad y organización, pasándo por recetas de cocina y asà hasta un sin fÃn de utilidades.
No obstante por desgracia la inmensa mayorÃa de desarrolladores de estas aplicaciones no son españoles, siendo estos últimos una gigantesca minorÃa en comparación con los estadounidenses o los ingléses.
A pesar de esto, hay que decir que las pocas Apps que son desarrolladas desde nuestro paÃs gozan por lo general de bastante calidad (si hablamos de desarrolladores serios y empresas), asà pues tenemos el ejemplo de la exitosa Spotbros, una aplicación de mensajerÃa social que pretende mirar de tú a tú a aplicaciones tan consagradas como LINE o WhatsApp.
Hoy tenemos noticias sobre otra aplicación española con bastante buena pinta y que esta vez viene a cubrir el terreno del ocio (porque también existe el ocio ¿Verdad?), hablamos de Shiny The Firefly, un simpático juego donde nosotros somos una luciérnaga y nuestra principal misión es encontrar a nuestras crÃas perdidas en el frenesà de los aspersores de un jardÃn.
El juego se presenta con unos gráficos que cumplen con nota y con un aspecto que a mi en lo particular me ha gustado bastante. Ha sido desarrollado por desarrolladores españoles que anteriormente han trabajado en empresas tan prestigiosas como Pyro Studios o Electronic Arts y la podemos encontrar en Google Play a un precio de 1,79 y Free la versión demo de prueba en la que puedes jugar ni más ni menos que 11 niveles, yo desde luego más tarde me la descargo. ¿Y tú?