Twitter es una de las redes sociales más utilizadas en todo el mundo. O mejor dicho, es una de las redes sociales con más usuarios en todo el planeta, que no es lo mismo. Sucede que está comprobado que de cada dos personas con una cuenta y un perfil, una de ellas no suele tweetear absolutamente nada.
Este análisis de mercado, realizado por los propios especialistas de Twitter desde la salida de la firma a la bolsa, ha determinado que aunque la red social posee alrededor de 232 millones de usuarios mensualmente activos, sólo 119 millones ingresan a la plataforma para escribir algo. Y dónde queda entonces eso de “activos”?
Bien, la explicación de Twitter es que se considera “usuarios activos” a aquellos que se toman la molestia de ingresar a Twitter al menos una vez por mes, aunque no tweeteen nada ni se envíen mensajes con otros usuarios. En cualquier caso, está claro que son números que no hacen honor a la actividad real de la red social.
Lo que sucede, además, es que Twitter es una red social perfectamente compatible con la ausencia de la primera persona protagonista, algo que es poco probable en Facebook, y que si sucede, está mucho más relacionado con los stalkeadores que con otra cuestión. De hecho, en la red social de Mark Zuckerberg las estadísticas en torno a estas personas potencialmente peligrosas son alarmantes, mientras que en Twitter es algo que recién se está investigando y no tiene gran alcance.
Aunque está claro que Twitter deberá trabajar en los próximos tiempos para lograr que sus usuarios más remolones también aporten lo que tienen que decir, hay que hacer una aclaración más que importante, y que tiene que ver con que de esta red social podemos servirnos inmensamente incluso cuando nosotros no aportemos teórica, ni prácticamente, nada a los demás usuarios.