A pesar de la enorme cantidad de críticas que los usuarios de dispositivos móviles le han dispensado en los últimos tiempos, Facebook Messenger sigue creciendo en su cantidad de descargas gracias a la eliminación del chat de la app original de la red social más famosa del mundo. Y como prueba de ello, en estas horas acaba de llegar a los 500 millones de usuarios a nivel global, así que vamos a repasar algunas de las cuestiones de este hito.
Facebook Messenger, cada vez más popular
En efecto, lo primero que debemos destacar es que la gente de Facebook se está saliendo con la suya respecto al Messenger, ya que su primera intención es que llegara a volverse tan popular como WhatsApp, para algún día unificar ambos servicios. Y aunque de alguna manera han obligado a los usuarios a que la descarguemos, su primer objetivo se ha cumplido llegando a los 500 millones de descargas en todo el planeta.
Lo increíble del caso es que a diferencia de lo que uno podría llegar a pensar, son más bien pocas las aplicaciones que han alcanzado ese nivel de descargas en todo el planeta, y hasta el momento eran sólo cuatro: Gmail, YouTube, Facebook en su versión original, y WhatsApp. Como se puede ver, dos de ellas pertenecían a la propia red social, que ahora tiene tres, y las otras dos a Google, que ha quedado segunda en esta contienda particular.
Una app en constante crecimiento
Si tenemos en cuenta que desde que WhatsApp ha sido adquirida por Facebook, la mayor cantidad de innovaciones de los desarrolladores de la red social fueron a parar a su Messenger y no a la mensajera más popular, y a eso sumamos los intentos por comprar también la app de mensajería segura Snapchat, podemos dar por hecho que la idea de Mark Zuckerberg es que Messenger resuma todas las comunicaciones rápidas entre móviles en el mundo.
Incluso, en las últimas semanas han comenzado también los rumores que indican cuáles son algunos de los planes de futuro más auspiciosos que tiene Facebook con respecto a Messenger, y entre los que podemos mencionar la incorporación de servicios de terceros, como los pagos por intermedio de PayPal, o también el uso de Uber, una polémica aplicación para conseguir coches no oficiales que funcionen como taxis.
Fuente: Enter
